Contar hasta tres

Paulina Molina

Autora del poemario "Olvidarte", en el cual aporta reconocimiento al arte femenino.

Tengo tantas espinas como pétalos

Me convierto y cambio

con el tiempo,

me pierdo y me encuentro

en las personas, en los lugares,

en el ruido y en el silencio.

Me he conocido más de una vez

y me ha tocado aceptarme

en pedazos y completa,

llena de amor y a veces

con nada más que vacío;

con luz y oscuridad,

valiente y temerosa,

en calma y en tormentas,

con claridad y con delirios.

Tengo tantas espinas

como pétalos,

algunas vienen de mí

y otras me brotan cuando

soy el aprendiz.

Cada noche busco abrazarme,

sentirme y curarme,

así, a pausas, sin prisa;

y entiendo que con espinas o pétalos

— no importa—

me quedo conmigo.


Contar hasta tres

Desee tantos tus besos que solo uno bastó

para saber que los extrañaría por lo que me sobra de vida.

Me pregunté tantas veces si el destino

era quien nos tenía entrelazados o solo éramos nosotros

jugando a ser él y buscando desastres

que nos condenaran a recordarnos de vez en cuando.

Este recuerdo que no deja de ser inoportuno

y solo me repite lo alejados que estuvimos de ser;

vaya manera de abrirme los ojos para que no olvide que ya fue.

Debo mantener mi puerta abierta y después no permitir que entres.

Estoy cansada de contar hasta tres para poder olvidarte.


Ser amada

Tal vez al final tus besos son una forma

en la que la vida quiere gritarme que debo soltarme

el cabello y ser libre. Tal vez estar en tus brazos

es una probadita sutil y frágil de lo bello

que es bajar la guardia y permitirme ser

de la manera en la que decida nombrarme.

Escuchar en tu voz al amor, a la paz y a la locura,

que tus dedos enredados en mis pensamientos son

solo la claridad que necesito para entender que yo decido

cómo quiero ser amaba. El calor de tus dedos en mis

caderas sosteniéndome y dejándome en claro que

más allá de ellos no hay vacío, pero que si lo deseo puedo

quedarme aquí, en ti. Estás enseñándome que llamarte

hogar no significa que deba cerrar la puerta con llave,

que amar es hacer algo bajo libertad.

Paulina Molina

Nacida un 25 de mayo en la ciudad de Chihuahua, actualmente radica en el estado de Sonora. 

A pesar de dedicarse al campo de la salud, la poesía ha estado presente a lo largo de su vida, de tal manera que logró hacerla querer ser una parte de ella (aunque sea pequeña). 

Su poemario ¨"Olvidarte" forma parte de una antología publicada en Colombia después de haber ganado un concurso de poesía. Su libro "Nuestra última vida" está a punto de ser publicado.